Cuerpo. Ese lugar que a veces es un templo y otras cuesta tanto no criticar. Espacio que nos pertenece y en ocasiones no sabemos valorar. Es vital conocerlo, aprender a escucharle y ser conscientes de la importancia que tiene.
Esta importancia no es más que la de estar sano para ser nuestro soporte. Debemos pensar en su funcionalidad y mantener las ganas de movernos y cuidarnos. Pero para hacer esto de una manera sana es fundamental alejarse de las apariencias. Apartar los estándares imposibles de nuestra mente no es tarea fácil. Debemos entender que la perfección es una idea inalcanzable, que solo nos obsesiona y provoca malestar.
Septiembre está a la vuelta de la esquina y la mayoría buscamos retomar la rutina, liberarnos de los excesos del verano y encontrar un orden en nuestras tareas. Aunque muchas no queramos que se termine el verano, sabemos que el cuerpo necesita un ritmo, unos hábitos y lo notamos bien presente.
Recuerda que el primer paso con tu cuerpo es la aceptación. Aceptarnos es comprender que nuestro cuerpo merece ser cuidado a pesar de sus defectos. Consiste en abandonar los pensamientos negativos, siendo más amables con nosotras mismas. La aceptación te permite estar en paz contigo misma y concentrarte en tus verdaderas necesidades. Además, focalizarte en qué quiere tu cuerpo aquí y ahora te prepara para cuidarte mejor.
Vamos con 5 pasos para la aceptación:
1. LEJOS DE LAS CRÍTICAS
Cambia la manera negativa de hablar sobre tu cuerpo y compárarlo con el de las demás. Cada cuerpo es diferente y no por ello menos válido.
2. LA COMIDA ES TU AMIGA
Una alimentación adecuada y suficiente te permite tener una mejor salud. Necesitas hidratos, proteínas y grasas para estar sana. ¡Disfruta de la comida de una manera equilibrada!
3. LA SALUD ES LO PRIMERO
No priorices tu imagen frente a tu salud. Ajustarse a los cánones de belleza actuales no tiene por qué significar estar saludable. Cuídate y piensa en tu calidad de vida.
4. VALORA TUS CUALIDADES
Trata de identificar los aspectos positivos que te definen. Piensa en todas las cosas positivas de ti misma, tanto físicas como relacionadas con tu personalidad. Eres más de lo que muchas veces crees.
5. NO LEAS LA MENTE
Comprende que el resto te ve mejor de lo que piensas. Siempre tendemos a ser más críticas hacia nosotras mismas que hacia los demás. Así que, salvo que tengas el poder de la telepatía… ¡Evita intentar adivinar lo que están pensando de ti!
Así que ya sabéis chicas, más autoestima y aceptación porque eso te llevará a disfrutar mucho más de tu día a día y a querer más . Eso se reflejará en tu físico y brillarás de una manera que lo notarás y te lo notarán.
Si quieres saber más sobre este tema te recomendamos leer este artículo sobre la autoestima y las creencias sobre imagen corporal en mujeres.
¡Feliz fin de agosto! ¡Bienvenido Septiembre!
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